Hola Noel y Ramón. Gracias por la bienvenida.
Ramón sigo desde hace tiempo tu página con muchísimo interés, es una fuente de aprendizaje e inspiración continúa, te felicito.
Las tortugas eran Kinixys belliana noguelly. Efectivamente llegaban en un estado deplorable, deshidratadas y parasitadas hasta los topes y esos creo que eran los los principales problemas para sacarlas adelante. Yo desparasitaba con Flagyl y Panacur en tandas semanales durante un mes (no recuerdo las dosis, en su día me las recomendaron en el foro de TortoiseTrust), más baño hidratante templado dos veces al día. Lo que salía de aquellas cacas es difícil de describir, miles y miles de gusanos. La alimentación tuve que forzarla con sonda a base de papilla de pienso de iguana (era lo que había por aquel entonces), higos chumbos triturados por la proporción calcio-fósforo, algo de papaya y suplementos vitamínicos. A las pocas semanas ya se empezaban a encontrar mucho mejor y a base de estimular con lombrices de tierra empezaron a comer por sí solas.
Después de eso me encontré con unos animales muy duros, curiosos, voraces y fáciles de mantener en un terrario específico de dos metros de largo por 60 de ancho con foco de calor y luz UVB 5.0, con humedad alta, sin preocuparse excesivamente pero muy bien ventilado, el verano siempre lo pasaban al exterior.
Las tuve muchos años y cuando tuve que cambiar de casa por un traslado se las regale a un amigo tortuguero, el macho sobrevivo hasta hace un par de años, era adulto cuando llegó y vivió unos 21 años.